sábado, 10 de noviembre de 2012

 

 

DEL NATURISMO AL HIGIENISMO

El higienismo no es nuevo, comenzó en 1820 en Estados Unidos y partió, según ellos, cuando los naturistas observaron que aunque mantenían una vida natural, se enfermaban de lo mismo que los carnívoros.
-Lo que comemos a diario debe ser compatible con el aparato digestivo del organismo. El higienismo se dio cuenta de ese detalle y buscó la forma de mezclar los alimentos en forma adecuada. Pero como ningún organismo es igual a otro, en las terapias proactivas que realizamos no existen tratamientos iguales para todos -explica.
La terapia proactiva efectúa un estudio denominado biodiagnosis, dura aproximadamente hora y media y revela la historia clínica de la persona. Se trata de un cuestionario y cada tratamiento es absolutamente personal.
-Todo lo que comemos se transforma en sangre. La sangre que viene de una papa frita es muy distinta a la de una manzana. Si comemos sano, nuestra sangre será pura y sin toxinas. Hay que pensar que es la misma sangre la que tiene que reparar tejidos y todas las áreas de desastre del cuerpo. Por esta razón, los higienistas no se enferman, y si tienen cáncer, lo detienen. Incluso en el caso de la metástasis, la persona muere sin dolor. Cuando la gente llega a mi consulta es porque ya ha ido a muchas otras donde no se pudo hacer nada por su salud. La verdad es que aparecen porque pensaron "y, bueno, vamos a probar con esto" -dice Mauricio Esteban.